Soñar
31 marzo, 2010
Estas noches, son noches de insomnio intermitente, de desazón, de angustia, de agonía. Noches en las que lo que las pesadillas no me dejan dormir.
El temor al descubrirse en medio del mar abierto, en medio de una planicie, sin nada en el horizonte. En blanco.
Noches sin sueños.
Sin embargo, anoche, en medio del dolor, soñé con un rostro. El rostro de una desconocida. Sólo eso. Un rostro.
Un rostro que voy olvidando a medida que el sol sube.